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Sigo en Ontario y aún seguiré hoy si me quedo en Óttawa a dormir. Recojo la tienda y carretera. Efectivamente, esta moto anda mejor después de limpiarla… Que agradecida!!!

Ótawa no se encuentra muy lejos de donde estoy, así que para las doce del mediodía estoy allí. Hoy va a ser un día especial. Voy a casa de Teresa que vive allí y me ha invitado a quedarme con ella. No la conozco personalmente, pero las referencias que tengo son inmejorables y siendo de la familia que es… buena gente seguro.

Llego a Óttawa y Teresa está arreglando su jardín. Me mira y automáticamente viene hacia mi. O es un marciano o es Montxu en su moto, sobran las presentaciones. Un caluroso abrazo delata su talante. Da por descontado que me quedaré a dormir y yo agradezco encantado su ofrecimiento. Estaba a la expectativa de su reacción. No quería forzarla. Teresa no habla más que inglés. La cosa se va a poner difícil. Comemos juntos, charlamos un rato, me enseña su preciosa casa y me voy a conocer la ciudad unas horas.

Óttawa es la capital de Canadá y tiene un millón de habitantes. El tráfico es denso pero aquí no pita nadie. Aparco en un parking en el centro y me voy a visitar el parlamento y la zona monumental. Realmente bonito. El ambiente de la ciudad no es muy bullicioso, mas bien parece una ciudad tranquila. Hago algunas fotos. Tengo pereza últimamente con la cámara. Veo el cambio de guardia. Muchos recuerdos escultóricos de la participación de Canadá en los grandes conflictos bélicos del siglo pasado. Me acerco a ver a la hermana de nuestra araña Maman. Es casi igual, un poco más pequeña quizá.

Hay unos rápidos del río en la misma ciudad que impresionan por lo torrenciales, son enormes. Después de varias horas vuelvo al parking. Rodeo el edificio y no veo la entrada. Teresa me estará esperando. Cenamos a las seis y media. Voy justo. Pregunto y no saben decirme. Esto no es posible. Es un parking público, la leche!!! Al final entro en el hotel Marriott que comparte uso del parking y me dejan bajar desde sus ascensores. Voy casi corriendo. Monto en la moto y me acerco a la salida. El cajero está en la misma barrera y es automático. Esta máquina está muerta. Será posible!!! Llamo por el interfono y me contesta una señorita amablemente, supongo, por que no entiendo una sola palabra de lo que me ha repetido tres veces. Es más fácil hacerse entender que entender lo que te dicen. Yo selecciono las palabras que conozco pero ella no sabe las que se yo. Total. Sorry dis machine is aut, nou laigt, ai put the tiket in, and nozing, si is ded. Vuelta con la misma cantinela y corta la comunicación. Ahora , que demonios hago yo?Retrocedo con la moto y vuelvo a acercarme. Ahora si me ha detectado. Eureka!!! esto mismo me pasó en USA en algunos peajes. Aquí casi no hay motos y los sensores no están preparados para detectarnos. La máquina se enciende con unos preciosos leds azules. Introduzca su tiket. Biennn!! Tiket defectuoso. Contacte con el encargado. Lo repito con igual resultado. Me bajo de la moto. Estoy solo y hasta los huevos!!! La barrera deja muy poco espacio hasta la pared. Desmonto las maletas, las paso al otro lado. Me monto en la moto e inclinandola paso rozando. Por pelos, pero paso. Monto las maletas y me marcho. Mierda de garaje.

Lo siento Teresa. Le cuento la historia y se ríe con su sonrisa pícara mientras me ofrece una cerveza que bebo casi de un trago. Ha preparado la barbacoa con unos maravillosos solomillos, ensalada, verduras y algo que desconozco totalmente. Que es esto? Fiddleheads!!! Me quedo como estoy, pero el señor Google me dice que eso quiere decir, cabeza de violín, y realmente, esa verdura tiene una forma similar a la parte superior del mástil del violín, donde se enrollan las cuerdas. Son brotes de helecho, me explica Teresa. Su sabor es impresionante. Diferente. Como, hasta hartarme. Luego me entero que pueden ser tóxicos si no se cocinan bien. Aún estoy vivo, gracias Teresa. Este vino canadiense se deja beber y vamos por la segunda botella.

Cuatro horas de agradable charla, convierten sin duda, la cena, en lo mejor del día. Esta mujer es fantástica y es una mujer muy fuerte. Desde este blog te quiero dar las gracias, otra vez, por un fantástico día. Os espero en España.

Un buen descanso y mañana Montreal. El final de mi estancia en Canadá.

Hasta mañana

Hoy salgo de Sault St. Marie con un único objetivo, avanzar. Tengo muchas ganas de llegar a Óttawa y a Montreal y tengo una panzada de kilómetros por delante. 800 km no se deben recorrer en un día sobre una moto sin una causa que lo justifique de verdad, así que tengo previsto hacer la mitad y parar a dormir en algún sitio cerca de la ciudad de north Bay a orillas del lago Nipissing. El recorrido sigue siendo bonito con multitud de pequeños lagos y, no se si es que después de disfrutar del lago Superior ya nada me parece lo mismo o lo que es más probable, tengo otro objetivo en mente y no me fijo tanto. El caso es que está siendo un día de carretera, gasolinera y sandwich. No creáis que un día como el de hoy es un día de disfrute perdido, en absoluto. El aire en la cara, el ronroneo del motor y mis pensamientos, son suficientes para disfrutar de la ruta. Que raro eres tío!!! igual si, pero así lo he comprobado mil veces.

Ayer, a mi llegada al hotel, tuve un pequeño incidente con la encargada. Además de cargarme la habitación en la tarjeta, me hizo un cargo adicional de 100$ canadienses en concepto de depósito. Ante mi extrañeza, lo único que se le ocurre decir es que siempre lo hacen así y que mañana, osea, hoy ya, me lo devuelven. Como ella no quiere decirlo, se lo digo yo. Este cargo es por si robo o rompo algo de la habitación, no? ellas asienten, algo avergonzadas. Esta vez no me callo. Osea que ustedes no se fían de sus clientes, muy bonito!!! y quieren que yo me fíe de ustedes con la devolución del depósito. Pues tampoco me fío. Necesito que me firme usted aquí, en el tiket, que esto es por un depósito y que se me devolverá mañana si todo es correcto. Me miran con cara de haba. No me iré hasta que lo firmen. Lo hacen y me voy a la habitación. Estoy hasta los coj.. de la desconfianza y la prepotencia, y me extraña tanto en un país en el que ya me he acostumbrado a dejar todo a la vista mientras voy a pagar en cualquier gasolinera. No se, «Quid pro quo».

Llego a North Bay. Estoy muy fresco. Puedo seguir una hora más y mañana estoy más cerca de Óttawa. Lo hago. Estoy ahora en una zona llamada Laurentia Hills. Es una zona boscosa con su correspondiente lago. Veo un camping. Entro, tiene buena pinta. La señora de recepción me indica la parcela, me cobra los 30$ y se va. El sitio es maravilloso. Los baños mejor que en muchos hoteles. Barbacoas comunitarias. Barquitas para el lago. Hidroavión… y juegos para niños. Lugar perfecto para descansar. Monto la tienda en dos minutos y me acerco con la moto al sitio de comida más cercano, a unos 20 km. Por el camino, en el borde de la carretera, como si fuese un espectro, mi primer alce. Ahí está mirándome. Casi negro. Freno bruscamente. El enorme bicho se asusta y de un salto se adentra en el bosque. Me ha impresionado.
Con el calor del día, el asfalto se calienta y este calor permanece, en parte, durante la noche. Por desgracia los animales salvajes, en ocasiones, se acercan a la carretera en las horas nocturnas para captar algo de este calor. Ese es el momento en el que algunos encuentran su final, y en el caso de los alces, dado su elevado peso, también lo encuentra algún conductor.

Antes de meterme en la cama y aprovechando el grifo de mi parcela, me dedico a dar una limpieza a fondo a Serafina. Lo estaba necesitando. Seguro que mañana anda mejor. Me pasa siempre.

Metido en mi tienda, repaso el día. No hay mucho que contar pero me siento alegre. Tengo mucha suerte. Hago una o dos fotos al techo de la tienda, que tontería!!, mientras pienso en mañana y me duermo.
He dejado algún palo sin recoger y se me esta clavando en los riñones. Dita sea!!!

Hasta mañana

 

Me levanto con poco ánimo. Ha llovido torrencialmente toda la noche y las previsiones para hoy y los próximos días son de lluvia en toda la zona que recorreré. Este hotel ha sido especialmente desagradable. Nada grave, pero no es de esos sitios que te levantan el ánimo, esta noche me voy a uno bueno. Supongo que es como cuando estas depre y te atiborras a chocolate.. pues lo mismo, pero más caro.

Ayer recorrí el pueblo. Como todos. No existen núcleos de población como los entendemos en Europa, que no nos cambien, por Dios!!!. Parecen asentamientos de servicios, cada uno a lo suyo, sin ningún orden, estética o urbanismo y, lo más curioso, viven junto a un maravilloso lago y están de espaldas a él. Ni los restaurantes, ni las casas, ni los paseos ( que no los hay) se organizan en el borde del lago. Tendrá una razón, no es la primera vez que lo veo, pero no alcanzo a comprenderla.

Bueno. Ánimo. Al mal tiempo buena cara. Recojo todo. Me pongo el chubasquero y arrancando!!!

Lluvia ligera y niebla muy espesa. Antes de salir, una señora se ha acercado a mi y me ha dicho «Wet» ya lo se, señora, preferiría seco pero, es lo que tenemos hoy. Ahora si, arranco!!!

Este pueblo se llama Marathon y mi destino hoy es seguir bordeando el lago superior hasta llegar a Sault St Marie, 400 km más al sur. Un paseo. Los camiones me duchan. Muchas gracias, abusón!!! El tiempo no parece que empeore.

Veo esta enorme masa de agua hoy y casi todo el día de ayer. Vaya, me tengo que parar por otra obra en la carretera. Punto muerto. Decía que toda esta masa de agua, a mi no me parece un lago, así que lo llamaré Mar Dulce, bonito, no? Cuando un lago no es de agua dulce le dicen lago salado. Pues cuando un lago se pasa de grande y este se pasa mil pueblos, lo llamaremos mar dulce, claro, pura lógica. Gracias a ti!!, adiós  amigo!!!. En todas las obras de Canadá, el señor que regula el tráfico, cuando pasas, te saluda como pidiendo disculpas por la interrupción. Que majos.

El tiempo mejora por momentos. Si sigue así, tendré que quitarme el chubasquero. El borde del lago es cada vez mas bonito. Noto que este paisaje me está animando.Me paro aquí mismo. No hace falta buscar mucho, justo junto a la carretera hay lugares de ensueño. Saco el termo y tomo un sorbo de café, mientras disfruto como un niño del paisaje que hay ante mis ojos, todo para mí. La niebla cubre totalmente el lago, dándole un aspecto inquietante. El borde del agua está formado por una linea de cantos rodados de colores. Cojo dos o tres. No hace frío pero sigo con el chubasquero fosforito. Esto es el cielo!!! Después de un paseo, sigo mi camino. La niebla intermitente y el paisaje sigue mejorando. Árboles de todo tipo. Mil tonos de verde y este lago, en cada curva, que aparece y desaparece a voluntad del bosque, que lo invade hasta la orilla. No puedo parar cada kilómetro. Saco la cámara de vídeo con el alargador e intento grabar según circulo. Esto es peligroso, lo haré con cuidado.

No hay Resorts, no hay merchandaising en las orillas de la carretera, no hay urbanizaciones de lujo, ni de pobres…. Una carretera, un mar dulce, el bosque, mi querida moto y yo, y esos deseos de compartir que te asaltan cuando eres feliz. Quizá por eso escribo lo que veo y siento. Me acuerdo de mi chica, Marta vamos a volver aquí algún día juntos!!!. Me acuerdo de Bruno y Adri, mis campeones. Adri!!! ni por asomo me expresaste la inmensidad de este paisaje. Me acuerdo de mi madre. Este mar es como tu vecino, parece igual de grande pero no se enfada. Te encantaría. Me acuerdo de mi cuadrilla y de todos mis amigos. Tendríais que estar aquí en este momento, Cabronazos!!!  Me acuerdo de mis hermanos, que tanto disfrutan con el camping. Esto es la Meca!!

El cielo empieza a despejar y hace calor, 25 grados me dice Serafina, siempre pendiente de todo, infalible. Esta moto es perfecta, pero en ocasiones las rodillas se quejan un poco. Un rato de pie y como nuevo. Pero…que es eso? No me lo puedo creer, me han parecido iceberg junto al lago. Intermitente a la derecha, paro y me doy la vuelta. Joder!!! son trozos de hielo en el borde del lago. Cojo la cámara y me acerco. Efectivamente es hielo, no estoy soñando. Me hago unas fotos por que esto no se lo cree nadie.

Continúo. Hoy el café me lo tomo por puro vicio, no me hace falta activar el cerebro. Está que se sale. Me vuelvo a parar en una zona de rocas rosáceas como en Plumanach, Francia. Me quedo mirando al mar, a este inmenso lago que llevo ya 650 km bordeando y que desde mañana ya no veré más.

Tengo hambre. Se me había olvidado comer. Paro y compro un sandwich doble, una cocacola y una manzana verde. Un señor me dice que pare en una playa a 10 km de donde estamos. A por ella. Llego. Aquí no puedo entrar con la moto. Hay un badén de arena enorme. Con un par Serafina, si tu te atreves yo también!! Alguien nos sacará de la arena. Dos culetazos de la perjudicada rueda trasera, pero no se ha hundido. Que bien. Con unas vistas inmejorables tomo mi comida. Del sandwich no voy a hablar…Termino la comida y salgo tranquilamente, por el camino que está delante de mis narices, y que es por donde debí entrar…

Hoy llego a Sault St Marie pronto. No me la juego con el hotel. Este día tengo que rematarlo. Salgo a cenar y vuelvo. No hay nada en una ciudad que pueda, ni por asomo, igualar a lo que he visto hoy sobre la moto. No quiero olvidarlo.

Mañana, rumbo a Otawa con noche en North Bay a orillas del lago Nipissing.

Hasta mañana.

 

Al fin y al cabo, no hay tanta diferencia entre dormir en un sitio malo y uno bueno. Me he levantado fresco y con ganas de marcha. Desayuno y carretera.

Después de 150 km llego a Thunder Bay. El Lago superior hace su aparición. Este es el lago más grande del planeta. 500 km de largo por 200 km de ancho y hasta 400m de profundidad. Como de Bilbao a Madrid, más aún, pero todo en agua dulce. Alucinante, no?.

Todo el camino sigue la misma tónica, ya que además del superior, hay multitud de otros pequeños lagos. Eso si. Si te paras para hacer una foto, te devoran literalmente los mosquitos y mosquitas, son más mosquitas.

Me desvío unas cuantas veces para explorar zonas fuera de la carretera.

Hoy me voy a parar pronto. Voy a descansar, dar un paseo y cenar bien. Tengo que neutralizar el día de ayer. Este pueblo tiene buena pinta. Marathón.

Hasta mañana.

 

Me despierto, estoy en Portage la Prairie, Manitoba. Al final me he decidido y me voy a acercar hasta BMW en Winnipeg. Me pilla de camino, a una hora, y así le miran esa rueda trasera a Serafina. Tiene mala pinta. Parece un concesionario serio. Han medido el dibujo de la rueda y me dicen que creen que llego a New York. Son 3.000 km más. Me decido por hacerle caso y programo mi GPS hacia la ciudad de Thunder Bay, ya se que no voy a llegar hoy, me pararé por el camino. El tiempo es bueno y el paisaje monótono, va cambiando poco a poco.

Han pasado más de 100 km y algo me huele mal. Ya se. Al salir de Winnipeg se me olvidó cargar gasolina y cuando me quise dar cuenta, el cacharro este me obligó a desviarme mucho para pillar la última gasolinera sin ir marcha atrás. A partir de ese momento recalculó un nuevo trayecto y yo ni mirarlo, seré…

Está usted llegando a Estados Unidos de América!!!, Prepare pasaporte !!!! Tócate los….A cogido la opción sur que pasa por Minesota. Que contrariedad!!!

Su pasaporte!!!(mal tono), me dice algo que no entiendo y le pregunto si habla francés ( estamos en la frontera con Canadá, no?). Está usted en USA y aquí se habla ingles!! ( el mal tono empeora). Vaya, no sabía que ser Estadounidense esta reñido con la cultura, lo pienso pero no digo ni media.

Apague la cámara del casco!!! la apago. En qué trabaja usted? Como dice…? lo repite. I am manufacturer of teeth. Es usted dentista. Afirma. Ahora quien es el que no entiende ingles, tontolaba? y deja de mascar chicle, hombre!! los dentistas no hacen dientes y yo he dicho manufacturer y lo has entendido. Sigo sin decir ni mu, por supuesto. Sale de su garita y mira la matrícula de la moto. Esta matrícula, de donde es? De Europa, de donde salió toda la cultura que dio origen a este país, antes de que os lo cargaseis. Que fácil es pensar, cuando te callas, jeje. Me devuelve el pasaporte y me voy. Ya creía que me iba hacer dar la vuelta. Bufff. Por qué pudiendo ser amable y agradable, como todas las personas que me voy encontrando en USA y Canadá, uno decide lo contrario? Que beneficios le reporta? O, simplemente nos comportamos así sin pensarlo? No sé.

Llego a un pueblo, Warroad. No es broma.  Me paro en la gasolinera y después de llenar el tanque le digo a la chica de la caja si tienen pegatinas de Minesota para la moto. Otra vez malas formas. Esto no pasa en Canadá y en USA tampoco me había pasado.  Sabes lo que te digo? Yo me vuelvo a Canadá pitando. Entrar y, Hola señor. Que tal!! Bienvenido a Canadá. Esto si, por favor, esto si!!!

Llego a fort Frances. Que bonito!!! me paro, doy una vuelta, una fotito, un cafecito. Sigo. Todo ha cambiado. Esta es la historia de los mil y un lagos, pero lagos profundos, serios, no como las lagunillas de Saskatchewan y Manitoba. Estamos en Ontario y este paisaje es muy serio. Vuelvo a disfrutar con cada curva y con cada paisaje. Me pararía cada kilómetro. Se me está haciendo tarde, hoy más que nunca. Entre BMW, y la frontera, no llego a Thunder Bay ni de coña. Me paro en Atikokán. Es tardísimo. Una habitación, por favor? Lo siento estamos completos. Hay otro motel en el pueblo. También lleno. El recepcionista hace unas llamadas. Todas sin resultados. Hay un camping? Está cerrado.

Me voy a la gasolinera. Se juntan dos o tres. Cada uno opina una cosa. Les digo que gracias, que sigo la ruta hacia Thunder Bay. Imposible!!!, me dicen. Hay 180 km sin un pueblo y no se puede conducir de noche por los mus. Los mus? que es eso? Cruzan la carretera. Mouse? y los piso con la moto? que raro!!! Sonríen. Moose !!! cuernos grandes. Aahhh Alces, pues suena igual jajajaja. No estoy para gracias, pero hay que reconocer que la tiene. Nos reímos todos. Muy peligroso. Uno de ellos opina que a 25 km hay un hotel, que me puedo arriesgar. Ya, y si esta lleno? Me animo. Está lleno!!! Que mierda!!! la señora comprende el problema y cuando me estoy marchando me dice que tiene una habitación con una cama detrás de la cocina, pero que la tengo que ver primero. Me temo lo peor. Me lo estaba temiendo. Perfecta señora. Zenquiu veri mach!!! De esta a desinfección, pero tengo donde dormir. Estoy contento. Me trae al cubículo algo de cena fría. Es lo que hay. La tomo y a dormir. Creo que un día sin pan se habría hecho más corto.

Hasta mañana.

 

 

 

La propietaria del alojamiento me pide, encarecidamente, que le ponga algún buen reporte de su motel en Tripadvisor. Soy el único cliente, no me extraña. Para el precio que tiene, está especialmente limpio y es lo único que valoro en este tipo de alojamientos. La carretera a 20 metros y el tren de mercancías al otro lado de la carretera no ayudan, no. Habla como una cotorra, no calla. No se estará dando cuenta de que entiendo una de cada diez? Pobre señora, está tan sola que con que la escuchen, ya está contenta. Parece buena gente. La pongo un «muy bien» y todos contentos.

Creo que mi equipaje esta sufriendo un proceso de dilatación irreversible y progresivo. Es un síndrome que vengo observando desde hace tiempo, ya que no contemplo la posibilidad de que las maletas se estén encogiendo. Hoy estoy empujando más que nunca. Lo siento Serafina!!! Por fin. Arrancamos!!!

Como el tiempo sigue estupendo, cambiamos el refrán y «a mal paisaje buena cara». Aunque ya comenté ayer, que la provincia de Saskatchewan es todo llanura, me lo estoy tomando con más calma. No veo grandes cosas, pero disfruto con la ruta. Aquí, en Canadá, dicen que en Saskatchewan no puedes perder el perro, por que si se escapa, cinco días después sigues viéndolo. Con muy buena vista, digo yo… Imaginaros todo llanura, no se, ¿1000 km? mas o menos.
Terreno yermo, en zonas hierba y en otras cultivos ya segados. Algún mechón de arboles muy aislados, siempre con una casita y lagos pequeños, charcas y algunos de porte mayor. Miles de lagunitas. Dicen que más de 100.000 en la provincia y no lo dudo ni un pelo.
Me fijo que en cada charca hay, habitualmente, una pareja de patos salvajes nadando, solo una, que raro!!! Estos patos, de todo tipo y color, en algunas hay hasta cormoranes, parecen estar muy orgullosos de su charca y no dejan que ningún otro se acerque, pero cuando se acerca un grandullón como yo con su cámara, se olvidan del orgullo y ponen pies en polvorosa. Que rabia, ya no lo intento más.

Estoy muy cansado. Solo llevo 200 km y me noto cansado. No sigo, me paro junto a esa iglesia abandonada y descanso. ¿Por que abandonarán una iglesia tan bonita? ¿Habrán dejado de creer los del pueblo? Vaya!! parece que las casas del pueblo también lo estén, ahora lo entiendo, aquí no vive nadie. Ya se por qué!!! por los mosquitos!!! Adri, tenías razón!!! Me voy!!
Además de los patos, la variedad de pájaros es grande. He visto hasta un pájaro carpintero en otra parada que acabo de hacer. Hoy no llego a Winnipeg, no me importa.
Miles de aves blancas, son muy grandes, pero no se que son. Me paro. Levantan el vuelo. Soy un tocapelotas!!! Por lo menos he fotografiado a las últimas. No está tan mal Saskatchewan, hombre!!

Tomaré un café en esta Bakery. Uhmm!!! café y uno de esos donuts con tan buena pinta. Me lo tomo. Cuanto es? 10 dólares. Lo siento, solo cash!! solo tengo tarjeta, no tengo más que dólares americanos. No se preocupe, le hago el cambio. De donde viene usted? a donde va? lo de siempre en Canadá. Me saca un cuaderno y me pide que escriba un saludo en español. Claro que si!!! Faltaría más. Además me da las vueltas en moneda canadiense. Ya tengo seis dólares. Para un apuro. Aquí todo el mundo es amable. Que maravilla de país.

Los mosquitos, moscas y demás insectos, empiezan a formar una coraza en Serafina, preocupante. Me voy a parar en una gasolinera para limpiar la pantalla, bendita pantalla, y los dos radiadores. Ya de paso, le damos de beber a mi compi, que se de «buen chivato» que tiene sed.
Me sirvo, entro y pago. Cuando me voy a ir, me doy cuenta de que el termo no tiene casi café. Me saco uno y vuelvo a la caja. Ya, le pago con los dólares canadienses, el café son solo dos. Me dice algo que no entiendo. Yes, only the coffe!! Sigue hablando, pero, no se dará cuenta… only coffe, only señora!! Sigue…, yes, yes a ver si se calla. ¿ que habrá dicho?. Sale del mostrador, de buen rollito eh!! coge una tarjeta como de crédito. La sella. Yo perplejo. Me la da, me da las gracias. y… se queda con mis seis dolares canadienses!!! a qué demonios he dicho yes? Que hago yo con esta tarjeta? Me la meto al bolsillo y me voy. Ja ja ja ja… Seré merluzo!!! ja ja ja y me la he llevado y de la verguenza ni he preguntado para que sirve esto. Me harán descuento si tomo otro café o gasolina? jajaja.

Ya son 500km, este pueblo se llama Portage la Prairie y ya estoy en Manitoba. Hasta aquí hoy de moto. Me voy a dar una vuelta y luego ceno.

Por cierto. Ya van 11.500 kilometrazos y estamos tan frescos, oiga!!!

Hasta mañana

 

El título hace referencia al nombre de la provincia canadiense que atravesaré, en parte. Ya sabía que tanto hoy, parte de ayer y, al menos mañana, el objetivo era avanzar. La zona central sur de Canadá es mejor pasarla y ya está. La llaman la gran pradera y no es más. Y como no quiero ser pesado y no he contado el día paso a paso, básicamente por que puedo resumirlo en una sola frase. Un verdadero aburrimiento. Eso sí, me he quitado de encima, casi 700 km. Jeje. Más me quedará para Ótawa y Montreal.

En este video os muestro mi » maravilloso» día.

Hasta mañana.

Para que vamos a negarlo, esta noche ha sido mala. Es la primera vez en mi vida que me despierto por frío en la cabeza. Me he puesto la gorra que me regaló Mike y he dormido con ella. Menos mal que no me ve nadie. Hago el petate y carretera. Objetivo, llegar a Jasper y recuperar algo.

Las montañas Rocosas son un macizo imponente que discurre desde Nuevo México en Estados Unidos hasta Alberta y British Columbia en Canadá durante más de 4800 km. El gobierno de Canadá lo ha declarado parque nacional por lo que, además de estar protegido, se encuentran muy pocos servicios.

Me paro en el lago esmeralda y un puente de piedra natural que ha horadado el río. Que escándalo produce el agua. Esto es precioso. Tanta agua como japoneses. Este fin de semana es puente en Canadá y hay mucho turismo. Llego a Banff. Es una ciudad preciosa, de vacaciones. Todo muy cuidado. Voy a información y me dicen que siga la 93 hacia Jasper, que está considerada la carretera más bonita del mundo… ¿Dónde se hace el concurso..? Vamos a ver. Me paro en un cruce. Mi GPS me dice que solo existen Jasper a más de 3000 km y no podemos estar a más de 300. Algo falla. En esto se acercan una pareja de ciclistas, no para decirme si necesito ayuda, lo cual es evidente por el mega mapa que tengo encima del depósito, no. La chica me pregunta que ve en la matrícula que soy de la UE pero que ¿de dónde?. Les explico todo el rollo y así, sin más, me dicen que viven a 24 km, que me vaya a cenar a su casa y que me puedo quedar a dormir, que esta noche tienen fiesta y que va también un mexicano. El marido, detrás de ella, me mira y asiente. Estoy tentado de aceptar, pero adiós Rocosas tranquilo y eso es importante. Lo agradezco efusivamente y rehúso. Insisten, ahora los dos. Lo siento, muchas gracias. Ella le mira a él. Parece que se lo toman como un desplante. Vaya por Dios. Os lo agradezco infinito. Esta reacción me confirma que mi decisión ha sido acertada. Estas cosas no me habían pasado nunca, pero tengo que seguir mi ruta. Ok, ten cuidado, hay muchos km sin servicios de ningún tipo antes de llegar a Jasper. Arranco y me voy. Parece que los viajeros en solitario, despertamos el alma protectora de la gente. Se nos ve débiles, otra cosa no me explico. Antes de arrancar con la 93 llego al Lake Louise. Es uno de los lugares más fotografiados de Canadá, por el reflejo de las montañas que lo rodean. Estoy emocionado. Lo he visto en fotos mil veces. Congestión de coches es poco. Chavales organizando los aparcamientos, Autobuses de Japos. Esto es Disney World!!! Aparco. Dejo todo en la moto excepto el casco y la cámara. Camino y llego al lago. No hay reflejo!!! ¿Pero… que es esto? ¡Está congelado!! Totalmente!!! Pero, ¡si aquí hace un calor de mil demonios!! Yo creo que el hielo, en esta parte del planeta, está como en casa, agustito y, total, para irse unos meses nada más, ya se queda, aunque parezca que estamos en Triana.

Hago unas fotos. Perdón. ¿Me deja pasar? Va a ser solo un momento. Gracias. Aquí todo el mundo es amable y cuando digo todos, son absolutamente todos. Llego a la moto. Recoloco todo. La cámara no está en el casco. Solo está el soporte. Busco y rebusco. Se me ha caído cerca del lago. Voy. Imposible aquí hay mil personas. Me vuelvo y quito el soporte para poner la de repuesto. No tengo con quien enfadarme, así que no lo hago. Es solo una cámara. Arranco. Muevo la moto y ahí debajo está. YIIIJA!!! Rayada la lente, pero está.

La carretera 93 es de esas cosas que justifican, en si misma, un viaje. Es como ir a la India para ver el Taj Mahal o Coger un avión para ver el Gran Cañón o el glaciar Perito Moreno. Esta carretera que estoy recorriendo y que no voy a terminar hoy, es sin duda, un espectáculo grandioso. Montañas nevadas. Lagos congelados, unos, otros no, no lo entiendo. Ríos caudalosos de color esmeralda. Me paro, me vuelvo a parar. ¡Al final me sale un oso!!!

Al final, encuentro un motel estatal y me quedo. Estoy cansado. Ceno y a dormir. Ha sido un día maravilloso. Pero no hay cobertura ni wifi. Hasta mañana.

Miro por la ventana y ahí está Lorenzo. ¿No habíamos quedado que tienen tanta agua porque llueve con frecuencia? ¿sobre todo en primavera?

Hoy me han hecho devolver una de las horas que me prestaron, como consecuencia, me he levantado tarde. Mi reloj biológico empieza a desajustarse. Serafina y yo hemos desayunado fuerte. Lo de ella ha sido sencillo, full. Lo mío, uno de esos desayunos que te arrepientes antes de acabarlos.

Arrancamos desde Icefields, en medio de las montañas rocosas y hasta Jasper, la ruta 93 promete. Mas solitaria que ayer y mucho, mucho más bonita. Va a tener razón la de información. Es dificil imaginarse una carretera más espectacular. Disfruto de cada kilómetro. No se ni hacia donde mirar. De tanto grabar con las Gopro agotaré las baterías en unas horas. Cataratas, glaciares, bosques y ríos esmeralda. Esto es el paraiso del campista. Todo está pensado para ellos. Camping, Rv park, areas especiales…

Me paro en las cataratas Athabasca. Bestial la fuerza del agua. Otro salto de agua. Muflones y ardillas por todos lados pero lo que es osos, nada de nada, solo los carteles, por todos los lados, de que son animales extremadamente peligrosos. Tanto que me han metido miedo en el cuerpo y cada vez que me paro solo, para ver algo, miro con recelo a cualquier cosa que mueva el viento.

Después de otros 150 km de naturaleza salvaje, llego a Jasper. Como una ensalada. Hablo con Marta. Envío un mensaje de felicitación a mi sobrino Gonzalo. Ha saltado 5.30 m en pértiga. Está que se sale. Todo un campeón que va a dar que hablar en este deporte. Arranco dirección Edmonton. Las montañas se van separando y hay más luz. Los lagos más extensos y, poco a poco, el paisaje se convierte en llanura boscosa. Las coníferas se mezclan con olmos y otros árboles. Es bonito, pero ya no es lo mismo. Me paro en un camping despues de recorrer varios kilómetros por pista de ripio. Está completo. Me indican que vaya a otro en Wabamun. Que lío, el de recepción me dice que tengo que ir hasta la zona de acampada. En la zona de acampada me dicen que vuelva hasta recepción. Sabes que te digo? Que me voy. Al final llego a Edmonton. Un hotel de paso y a correr.

Con las pilas cargadas de tanta maravilla vista hoy, tengo la esperanza de aguantar la que me espera, La gran pradera. Desaparecerán los árboles y la llanura será enorme. Mil kilómetros? Ya hemos recorrido British Columbia y parte de Alberta. La provincia de Saskatchewan espera.

Hasta mañana