La hora azul

Cuando el sol se ha puesto y la hora dorada desaparece, pero antes de la oscuridad, el cielo se vuelve, por unos momentos, de un intenso y profundo azul, el calor del sol empieza a dar paso al frío nocturno y las estrellas se insinúan. Ese contraste entre luz y oscuridad que sobrecoge y que anuncia la llegada de la noche.

 

Le Mont Saint Michel, en Normandía en el noroeste de Francia. Acercarse, lentamente, caminando, esperando la luz y la marea adecuada fue, a pesar del frío, un momento maravilloso que me ha dejado una huella imborrable. El trípode, una herramienta fundamental en estos casos si no quieres destrozar la foto con el iso demasiado alto.

 

La iglesia de la sangre derramada en San Petersburgo desde la avenida Nevski, impresionante lugar en memoria de un asesinato. La larga exposición, produjo ese efecto tan bonito en el agua. Pocas veces recuerdo haber pasado tanto frío para realizar una foto, aunque disfruté de cada minuto.