Blanco y negro

La fotografía en blanco y negro nos obliga a pensar más en formas y volúmenes, en luz y oscuridad, prescindir de los colores es dejar de ver el mundo como lo vemos, quizá por eso es más impactante y sorprendente, quizá por eso nunca acabamos de abandonarla.

El Horno Mariangeles, ya en desuso, recuerdo de un glorioso y contaminado pasado de la siderurgia en Sestao, Bizkaia. A esta fotografía en blanco y negro le añadí esos churretes de óxido para ambientar un poco la toma.

 

Con un angular de 17 mm y acercándome mucho al tridente, no tuve más remedio que cerrar el diafragma todo lo que pude para mantener el fondo nítido. El monumento representa a Bilbao venciendo a Neptuno y está dedicado a Churruca.